En los envíos nacionales e internacionales, casi siempre se utilizan palés de madera. Es un elemento necesario que garantiza la seguridad de cualquier carga que se transporte.
Pero los palés de madera están hechos de materiales naturales y son un producto de su entorno. Independientemente de dónde crezcan los árboles, la madera absorbe el aire y el agua que la rodean, lo que conduce al hecho inevitable de que los árboles también atraen a una miríada de plagas. Y en la seguridad de los palés de madera, es demasiado fácil para estos insectos viajar internacionalmente, y potencialmente arruinar la forestación de otras regiones a las que no pertenecen.
Los gobiernos y los fabricantes de palés han creado métodos para exterminar estas plagas, como el tratamiento térmico o la fumigación de los palés.
¿Qué son las paletas tratadas térmicamente?
Las paletas de madera tratada térmicamente se conocen comúnmente como paletas HT, y son paletas que han pasado por un proceso fitosanitario que fue desarrollado por la Convención Internacional de Protección Fitosanitaria (CIPF) en un esfuerzo por "garantizar una acción coordinada y eficaz para prevenir y controlar la introducción y propagación de plagas de plantas y productos vegetales".
Durante este proceso, los palés se someten a temperaturas de al menos 140 grados Fahrenheit durante un mínimo de 30 minutos. Pero esto no se limita a los palés. Si hay cajas o cajones que deban utilizarse durante el proceso de envío, también se someterán al tratamiento térmico correspondiente. Una vez que el proceso de tratamiento térmico garantiza la eliminación de todas las plagas y larvas, los palés tratados térmicamente obtienen un sello de aprobación y pueden utilizarse para transportar carga. El tratamiento térmico protege y previene los posibles riesgos para la salud y las repercusiones negativas para el medio ambiente que las plagas viajeras pueden acarrear a otros países.
¿Qué son los palés fumigados?
Al igual que los palés tratados térmicamente, los palés fumigados también han pasado por un proceso de desinfección para eliminar los insectos y larvas que viven en la madera. Pero en lugar de matar las plagas no deseadas mediante calor, se hace con tratamientos químicos.
El producto químico utilizado en el proceso de fumigación de la madera se llama bromuro de metilo, también conocido como bromoetano. En el pasado y en diferentes industrias, este producto químico se utilizaba como pesticida, fumigante y, a veces, como refrigerante. En el proceso químico de eliminación de plagas, los palés se apilan en una cámara sellada y se rocían con bromoetano para eliminar las bacterias de la madera.
¿Por qué se prefieren las paletas tratadas térmicamente a las fumigadas?
A pesar de la importancia que tuvo el bromoetano en múltiples industrias, su uso ha disminuido drásticamente, y ello se debe principalmente a los riesgos que entraña para la salud. Y ahora se prefieren los palés de madera tratados térmicamente a los palés fumigados.
Se ha demostrado que la exposición prolongada al bromuro de metilo es perjudicial para los seres humanos, y a menudo provoca problemas de salud a corto y largo plazo. Pulmones dañados, piel quemada, ojos irritados, riñones debilitados y efectos neurológicos negativos son sólo la punta del iceberg. Y el bromuro de metilo también causa estragos en el medio ambiente. El uso de este producto químico en particular también ha causado daños en la capa de ozono de la atmósfera terrestre. Al debilitarse el ozono, aumenta también la cantidad de radiación ultravioleta (UV) que llega a la superficie de la Tierra.
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